El libro «La Escuela de Salamanca y su proyección iberoamericana”, coordinado por Jorge Luis Gutiérrez, José Luis Egío García y David Torrijos-Castrillejo, es una obra que no solo rescata el legado intelectual de uno de los movimientos más influyentes de la historia de España, sino que también refuerza los lazos culturales, filosóficos y jurídicos entre España e Iberoamérica. Publicado en 2021, este volumen recoge las ponencias presentadas en un congreso internacional celebrado en la Universidad Eclesiástica San Dámaso de Madrid, donde más de sesenta investigadores de diversas nacionalidades analizaron la trascendencia de la Escuela de Salamanca y su impacto en el pensamiento moderno, especialmente en el contexto iberoamericano.

La Escuela de Salamanca, surgida en el siglo XVI, fue un movimiento intelectual liderado por figuras como Francisco de Vitoria, Domingo de Soto y Francisco Suárez, entre otros. Estos pensadores no solo renovaron la teología, la filosofía y el derecho, sino que también sentaron las bases del derecho internacional moderno y defendieron principios universales como los derechos humanos, la justicia y la dignidad de los pueblos indígenas. Este libro destaca cómo estas ideas, gestadas en España, trascendieron fronteras y se proyectaron en Iberoamérica, influyendo en la formación de universidades, en la evangelización y en la construcción de un pensamiento jurídico y moral que aún hoy tiene vigencia.

Uno de los aspectos más destacados de la obra es su enfoque en la proyección iberoamericana de la Escuela de Salamanca. A través de diversas ponencias, se analiza cómo los principios salmantinos fueron llevados al Nuevo Mundo por misioneros, juristas y teólogos, quienes adaptaron estas ideas a los contextos locales. Figuras como Alonso de la Veracruz, Bartolomé de las Casas y Manuel da Nóbrega son estudiadas como ejemplos de cómo el pensamiento español contribuyó a la defensa de los derechos de los pueblos indígenas y a la construcción de una sociedad más justa en América. Este enfoque no solo refuerza la imagen de España como una nación que exportó conocimiento y valores éticos, sino que también subraya el papel de la cultura española en la formación de las identidades iberoamericanas.

El libro también aborda temas como la teología, la filosofía, el derecho y la lingüística, mostrando la interdisciplinariedad de la Escuela de Salamanca y su capacidad para abordar problemas complejos desde una perspectiva integral. Por ejemplo, se analiza cómo los teólogos salmantinos debatieron sobre la legitimidad de la conquista de América, defendiendo la idea de que los indígenas eran seres racionales con derechos inalienables. Este enfoque humanista, que contrasta con las visiones más negativas de la conquista, resalta el papel de España como pionera en la defensa de los derechos humanos y en la promoción de un diálogo intercultural. Además, la obra destaca la influencia de la Escuela de Salamanca en la educación y la cultura iberoamericana. A través de estudios sobre la fundación de universidades y colegios en América, se muestra cómo el modelo educativo salmantino se extendió por el continente, contribuyendo a la formación de una élite intelectual que jugó un papel clave en la independencia y en la construcción de los estados nacionales. Este legado educativo refuerza la idea de España como una nación que no solo conquistó territorios, sino que también sembró las semillas del conocimiento y la libertad.

En resumen, «La Escuela de Salamanca y su proyección iberoamericana” es una obra que no solo rescata un capítulo fundamental de la historia intelectual española, sino que también refuerza los lazos entre España e Iberoamérica. A través de un análisis riguroso y multidisciplinario, el libro muestra cómo el pensamiento español contribuyó a la defensa de los derechos humanos, a la promoción de la justicia y a la construcción de una identidad cultural compartida. En un momento en el que las relaciones entre España e Iberoamérica buscan renovarse, esta obra es un recordatorio del profundo legado que une a ambas regiones y de la importancia de seguir cultivando ese vínculo en el futuro.